Las reformas de cocina y baño son las que más a menudo se llevan a cabo en los hogares españoles. Una empresa de reformas es la que se encarga de estos trabajos que a menudo incluyen retirar el anterior suelo y alicatado, cambiar las tuberías viejas y también reforzar la instalación eléctrica.
Muchas familias optan por cambiar el cuarto de baño cuando llegan a una edad en la que la bañera se les hace muy incómoda y necesitan cambiarla por una ducha. Esta pequeña obra es muy fácil de hacer y puede realizarse por separado o dentro de una reforma integral del baño. Dado que hay muchas ayudas para este tipo de arreglos del hogar, cada vez más personas se animan a remodelarlo.
También hay ayudas para el cambio de ventanas y para la instalación de calefacción o de aire acondicionado, por lo que este tipo de obras pueden solicitarse a la vez que la reforma de la cocina y el baño para acabar de acondicionar el hogar.
Para el cuarto de baño la gran mayoría de la gente opta por el alicatado total de las paredes. Esto es así porque hay mucha humedad en esta habitación y la pintura se puede enmohecer con gran facilidad. El alicatado es la mejor solución para tener unas paredes protegidas, impecables e impedir filtraciones de humedad. En la cocina las cosas cambian. Hay que poner en la balanza si es mejor pintar cada dos o tres años las paredes para que estén impecables o limpiar los azulejos al menos una vez por semana. Para el frente de la cocina sí que se presenta el alicatado como la mejor solución, aunque actualmente hay también placas que se pueden colocar para las salpicaduras.
El suelo del cuarto de baño y de la cocina puede ser de materiales muy diferentes, ahora incluso hay madera tratada que aguanta perfectamente un entorno que en principio es muy hostil para este material. Las cerámicas imitando a madera son bonitas y mucho más baratas, por lo que es una opción a tener en cuenta. También las hay imitando otros materiales como la piedra o los mármoles.
La mampara del cuarto de baño siempre es preferible de cristal. Aunque es más cara es mucho más bonita y también más fácil de limpiar. Además, se mantienen impecable durante mucho más tiempo.
Tras tomar estas decisiones, solo quedaría elegir los muebles de cocina y las piezas cerámicas del baño.