La mejor forma de hacer queso: la tradicional

¿Has tenido oportunidad de probar el Queso Gouda BIO? Si es así habrás notado la gran diferencia que hay entre este producto y el gouda que habitualmente compras en el supermercado. La razón de este cambio en el sabor lo encontrarás, precisamente, en el apellido BIO del producto.

BIO es una garantía de que el queso se hace da la forma tradicional, que es la mejor forma de hacer el queso, aunque con todos los controles y garantías actuales que le dan al consumidor toda la seguridad que necesita para tomar el queso sin miedo a contagios o a problemas de salud.

Para empezar, para que un queso sea considerado BIO el animal que ha dado la leche para la elaboración, que no fabricación, del queso debe de alimentarse de forma natural. Esto quiere decir que siempre que sea posible, pastará en el exterior y además lo hará de campos de hierba típicos de la zona en los que no se han utilizado herbicidas. Es decir, hierba que crece en dónde tiene que crecer, al ritmo que debe de crecer y sin experimentos transgénicos.

Esto no solo influye en la alimentación del animal, sino también en su bienestar, ya que pastar en el campo es la forma natural de vida para ellos. Si además a esto se unen unas condiciones adecuadas en el interior de la granja y unos cuidados estrictos respeto a la cría y a otros condiciones del animal, el resultado son vacas, cabras y vacas felices.

Una alimentación de calidad del animal y unas condiciones de vida buenas hacen que la leche que produce sea mucho más sabrosa y tenga incluso mejores valores que la de animales sobre explotados y sometidos a un gran estrés. Está demostrado que la leche de animales BIO es mucho mejor y solo hay que probarla para darse cuenta de esto.

La elaboración del queso en sí misma también es tradicional y natural, solo se añade a la leche el cuajo para que se forme el queso. Sin productos químicos innecesarios y que pueden alterar el sabor natural del producto. Por supuesto, se le da al queso el tiempo de maduración que necesita, sin acelerar artificialmente el proceso. Y todo esto hace que el sabor sea el que realmente debe de tener cada tipo de queso, como es el caso del Gouda de siempre.